El día martes 21 de mayo a las 19:00 horas recibimos un llamado que habían visto un perro, que parecía muerto en una zanja. Nos pasaron a buscar, fuimos a ver, y lo que vimos nos llenó de dolor, ira, bronca e indignación. Una perra raza pitbull, eso quiere decir, que fue comprada por alguien, que no llegaba al año, maniatada de las cuatro patas y a su vez atada del cuello a un pedazo de mampostería, en una zanja de un metro de profundidad por calle Juan XXIII a 3 cuadras de la Ruta 41, en un camino casi no transitado. La perra estaba helada, la llevamos urgente a la veterinaria, estaba deshidratada, con barro seco, se estima que por lo menos, ha pasado 4/5 días ahí, gusanos entre los dedos de sus patas y un prolapso considerablemente grande.
Agradecemos a los Dres. Davio y Kriletich, que hicieron denonados esfuerzos para que sobreviviera, recibió transfusiones de sangre, se le hizo una cirugía reconstructiva de la zona afectada, la cubrieron con bolsas de agua caliente y mantas térmicas para que recupera temperatura. No sobrevivió, pero al menos en sus últimos momentos estuvo atendida, cuidada, tratada con dignidad, y mucha gente que no la conoció a ella, pero si las circunstancias que fue hallada, la quiso, un hogar la esperaba…pero no pudo ser.
La persona que fue capaz de hacer esto a un animal, es capaz de hacer cualquier cosa a un semejante.
Perrita…ya sos libre…ya no sufrís, en realidad nunca deberías haber sufrido. Ojalá que tu muerte no haya sido en vano y nos animemos a involucrarnos, a denunciar el maltrato de seres puros e indefensos como vos.
HASTA SIEMPRE “INDIA”
ACTITUD ANIMAL BARADERO