El presidente chileno insistió en su posición de que la educación gratuita “no es conveniente ni justa” y que el sistema estatal sería monopólico. Los dirigentes juveniles le respondieron que no entendió la propuesta que llevan.
A menos de 48 horas de su reunión con los dirigentes del movimiento estudiantil que desde mayo demandan mejoras educativas, el presidente de Chile, Sebastián Piñera, insistió ayer en su rechazo a la gratuidad de la enseñanza, una de las principales exigencias de alumnos y profesores. Los estudiantes respondieron que el gobierno no entendió lo que pretenden y acusó al oficialismo de intentar criminalizar las protestas.
“No creemos que la educación gratuita para todos sea ni conveniente ni justa”, remarcó Piñera en un acto en La Moneda. Luego de tres meses de ininterrumpidas protestas, marchas multitudinarias, ocupación de colegios, huelgas de hambre y paros, Piñera invitó a los principales actores del conflicto a la cita en La Moneda. El gobierno ofreció mayores fondos, más becas, disminuir el interés de los préstamos estudiantiles del 5,6 al 2%, y reestructurar la deuda de los estudiantes morosos que figuran en un listado nacional de deudores que les produce complicaciones para obtener préstamos hipotecarios y de consumo.
“Tenemos un desafío gigantesco para hacer un cambio copernicano en nuestro sistema educacional”, dijo el mandatario conservador, que añadió que “debe haber beca garantizada para todos los alumnos vulnerables de nuestro país”. En ese contexto, planteó que “ojalá” se puedan aumentar esas becas, “desde el 40% más vulnerable (de los estudiantes) al 60%”, señaló.
El miércoles por la noche, en una cena con empresarios mineros, Piñera ya había arremetido contra la idea de estatizar la educación, lo que llevó ayer a los dirigentes del movimiento estudiantil a señalar que Piñera no entendió sus demandas. “Por supuesto, no creemos en estatizar ni monopolizar por parte del Estado la educación en nuestro país, porque eso, a la larga, es un atentado, no solamente a la calidad, sino a la libertad, y es un atentado a la equidad en la educación”, dijo el presidente de Chile.
“Creemos que debe haber proyectos educativos diversos, pluralistas, y que nadie puede pretender homogeneizar la educación”, subrayó. “Creemos en un sistema mixto en el que haya educación privada y educación pública, que el Estado vele por la calidad de ambos sistemas y también por el financiamiento, para que todos los niños y jóvenes puedan acceder a la educación de acuerdo a su esfuerzo y su mérito”, remató Piñera.
En reacción, los estudiantes llamaron ayer al gobierno y partidos oficialistas a no crear una “campaña del terror” con sus demandas, según dijo a los periodistas Giorgio Jackson, presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad Católica. El movimiento estudiantil “no se opone a un sistema educativo mixto con centros públicos y privados, sino al lucro en las universidades y colegios a costa de fondos públicos”, dijo Jackson.
Fuente: Efe y AP Tiempo Argentino.