Desde hace un buen tiempo, el destino del Teatro San Martín ha sido cuanto menos incierto. Construido por iniciativa del legendario padre Eugenio Betoño, fue languideciendo a partir del momento en que fue cerrado el cine y solamente quedó a sala en la que ocasionalmente se montaba algún espectáculo. Ante el estado de semi abandono que padecía, fue pasando por distintas manos que más o menos bien lo mantuvieron hasta el presente.
En los últimos años, un grupo de personas decidió hacerse cargo de la sala y puso manos a la obra para evitar el deterioro e intentar recuperarla, pero de acuerdo a un comunicado difundido hace unas horas, dicho grupo, denominado Comisión Amigos del Teatro San Martín, ha resuelto renunciar a ese cometido ya que, como se desprende de la lectura del documento, lo, único que hallaron, además de abandono, han sido dificultades.
Esperemos que el buen criterio prime en las decisiones que deben adoptar las autoridades eclesiásticas y que el teatro San Martín tenga el destino que su historia y el pueblo de Baradero merecen. El comunicado emitido por la comisión dice así:
A la comunidad de Baradero:
En febrero de 2009, ante los rumores de la posible demolición de nuestro querido Teatro San Martín, un grupo de docentes y allegados de la Obra Educativa Parroquial, decidimos enfrentar el desafío de tomar bajo nuestra responsabilidad la difícil tarea de poner otra vez en condiciones un lugar tan caro a los sentimientos de muchísimos baraderenses. Por eso, sin perder de vista los ideales y objetivos del Padre Betoño, de que este sea un lugar donde se enriquezca el espíritu, como así también ayudara a cubrir las necesidades económicas de la Obra Educativa, pusimos manos a la obra y entregamos muchísimo esfuerzo y horas de nuestro tiempo libre en la tarea.
En un edificio totalmente abandonado, comenzamos con las tareas de limpieza, pintura y demás primero con la única entrada de dinero de la venta de empanadas, ferias americanas, etc. y luego con un subsidio otorgado por la Secretaría de Culto de la Nación gracias a la gestión del Sr. Guillermo Oliveri, pudimos encarar obras de infraestructura como reparación de baños, techos y cielorraso de la sala, patio de la casa parroquial y lo que más nos preocupaba, tener la sala en regla, con todas las condiciones de seguridad requeridas para su habilitación, la cual también conseguimos con el correspondiente seguro de espectador.
En febrero de 2011, dispuestos a abrir las puertas del Teatro a la comunidad con talleres de teatro, canto, danza, plástica y guitarra recibimos la inesperada noticia que el Sr. Obispo , había nombrado un equipo de asesores para administrar los bienes del Obispado Zarate-Campana, entre los cuales se encuentra el Teatro San Martín, quienes decidieron que en abril de este año empezarían obras de refacción total del edificio, razón por lo cuál nos ordenaban suspender toda las actividades en el lugar, por lo tanto tuvimos que comunicar esto a los profesores que iban a estar a cargo de los talleres, para que busquen otro lugar donde desarrollar sus actividades del corriente año.
Pasaron abril, mayo, junio, y al ver que las tareas de refacción no comenzaban, que el letrado designado por Monseñor para la ciudad de Baradero, tampoco nos daba respuestas y ante la necesidad de seguir cumpliendo con el pago de los gastos de mantenimiento (impuestos, servicios, limpieza, etc.) decidimos programar algunas actividades culturales que nos ayudaran a seguir cumpliendo con las obligaciones económicas, que, de otra manera nadie afrontaría. Pero nuevamente aparece en escena la orden de la suspensión de actividades.
Ante esta falta de consideración hacia este grupo de trabajo, que lo único que busca es mantener este lugar histórico para disfrutarlo junto al resto de esta comunidad, y con el dolor y desazón que nos provoca esta situación, decidimos hacer un paso al costado y deslindar toda responsabilidad de los destinos de nuestro Teatro San Martín.
A quien le interese o desee consultar el destino de los fondos recibidos y generados podrá solicitar los informes detallados que quedarán en la Secretaría Parroquial.
Nuestro enorme y más sincero agradecimiento a los comercios de Baradero, que nos han brindado lo que ha sido necesario, dándonos todas las facilidades que estuvieron a su alcance, a los medios de comunicación que nos han abierto las puertas en las ocasiones que lo hemos requerido y a todos aquellos que han aportado su granito de arena para este fin. Tristes pero con la tranquilidad de haber obrado de la mejor manera, deseamos que en un mañana no muy lejano nos podamos encontrar unidos en un aplauso dentro de ese ámbito tan querido para nosotros.
Comisión Amigos del Teatro San Martín.
Ana S. De Battisti, Natalia Simón, Diego Benedetto, Eduardo Briasco.

!!!!!!!!!algo que es tan historico y con una trayectoria para la Iglesia Santiago Apostol, Instituto Ferrari,Asprella y Bolaños,que hemos pasado desde obras de teatro ,hasta recibir el titulo de nuestra secundaria!!!!!!!!!que esta pasando…por favor alguien que rebea esto…..sera una equivocación seguramente.
Esperemos que recapaciten y que no sea otra maniobra de “nuestro intendente y el sr.gallardo”a quienes han visto con ganas de “apoderarse” como es su costumbre.he visto a las personas trabajar para juntar plata para pintar y arreglar algo que estaba “abandonado”.me consta que despues del trabajo se reunian para ver que se podia hacer.es bueno que el pueblo sepa la verdad y las clase de gente que estan votando.ojala esto se arregle por el bien de Baradero.